El concepto de nuda vida en la obra del filósofo italiano Giorgio Agamben es central en la continuación de la biopolítica tratada contemporáneamnete por Michel Foucault. Hace referencia a la vida sin calificación, la vida en su estado desnudo, salvaje podríamos decir, especialmente desde la perspectiva de la vida política y social. La nuda vida no tiene una apropiación determinada, sino que es objeto de dominio de la esfera política en cuanto orden social.
La
nuda vida solo es conservada si se sujeta al dominio del poder soberano. Las
formas de vida son heterogéneas y, por eso,
cuando a los hombres se les despoja de sus derechos, el lenguaje legal
abre espacio a la aplicación de la violencia que se puede aplicar a éste por no
ser considerados como sujetos, esto pasa explícitamente en los estados de
excepción.
El
problema del pueblo es que está siempre dentro de un lenguaje que lo identifica
genéricamente, pero que al mismo tiempo lo excluye con la palabra legal, siendo objeto de una
potencial violencia. El pueblo como exclusión no puede formar parte de lo que
lo cual en que forma parte-
Oposición
entre pueblo y pueblo, ciudadanía y pueblo y nuda vida y forma de vida. Agamben
ve a la vida en función de la forma que adquiere, un modo de vivir; la nuda
vida que es absorbida por el espacio político del Estado, fundado en la palabra
jurídica. El estado transforma a la vida en una defensa contra la muerte, que
produce el levantamiento de la vida del Estado, de la soberanía. La vida sólo
se puede asegurar mediante la soberanía para alejar al estado de la muerte
violente del hombre por el hombre. Con ello la vida de la soberanía debe
absorber a las otras formas y/o modos de vida anteriores que se son nominados o
clasificados como por la palabra como estado de la naturaleza o como bárbaros.
La soberanía, entonces, se funda en esta violencia de la palabra como plantea
Esposito.
El
poder del Estado ya no se centra en el monopolio de la violencia, sino en el
control de la apariencia, en la vida política que se orienta en la idea de
felicidad en la época moderna, con la declaración de principios, por ejemplo,
de la sociedad estadounidense, donde la palabra escrita menciona el derecho a
buscar esta felicidad, pero en un campo de acción posibilitado, como lo es la
vida que otorga el nuevo Estado.
Aquí
es fundamental el concepto de nuda vida en Agamben; que es absorbido por el
poder soberano desde tiempos del imperio en Roma, pasando por el derecho
natural teológico, hasta el Estado moderno que se plantea como el defensor de
la vida. Al tratar de superar el alcance del concepto de biopolítica de
Foucault, Agamben también ofrece una nueva forma de entender la palabra dadora
de una nueva vida al hombre en un nuevo orden.
Nacen
nuevas palabras, nuevas nominaciones para la nuda vida, los modos de vivir.
Buen ejemplo pone Agamben cuando menciona el traslado del súbdito a ciudadano,
al igual que a la transición que ejercita con la palabra pueblo y campo.
Otro paso importante en Agamben es la relación que establece entre la política y la gestualidad como comunicación, es el gesto que tiene un alcance mayor que las palabras, lo que hace posible un elemento central en la biopolítica como lo es la visibilidad de lo endecible, en este caso.